Aunque la provincia de Teruel aparece en los registros como una de las que cuentan con los índices más bajos de delincuencia de España, los riesgos de las redes sociales no entienden de fronteras territoriales ni se frenan por tratarse de comunidades pequeñas. Así que los adolescentes turolenses no escapan a los riesgos de fenómenos conocidos sobre todo por términos anglosajones, como el sexting o, pero que tienen que ver con el uso de redes como WhatsApp, Instagram o Facebook.
Dentro del programa de sensibilización puesto en marcha por el Ministerio del Interior, el Inspector Lobera impartió el pasado lunes una charla para padres en el CEIP La Fuenfresca en el que alertó de algunos de estos riesgos, y entre las cosas que más llamaron la atención a los padres es que fenómenos peligrosos para los menores, que la mayor parte de los padres creen que solo se dan en grandes ciudades, también se han identificado en Teruel.
Así, el inspector alerta del uso que se hace de las redes sociales entre los menores para fomentar conductas perjuidiciales para los niños, también en Teruel tal y como comprueban habitualmente los agentes. Se trata de fenómenos como el “sexting”, bien sea activo o pasivo, que consiste en difundir imágenes por WhatsApp principalmente de menores en ropa interior o semidesnudas. En algunos casos, se trata de chicas que remiten este tipo de fotos a novios suyos, en relaciones que duran normalmente poco tiempo, y luego el chico difunde las imágenes entre los conocidos. Lobera recuerda que tener o distribuir este tipo de imágenes es delito, así que si alguien recibe esta imagen, adulto o menor, lo que hay que hacer es denunciarlo y destruirlo.
Otros malos usos que se hacen de las redes son utilizarlas para fomentar lo que se consideran comunidades peligrosas, como son las que fomentan por ejemplo la anorexia o la bulimia, pero también las autolesiones, el suicidio o la apología pedófila, entre otros.
Lobera alertó especialmente sobre los comportamientos machistas entre los menores, algo que ven con preocupación porque está relativamente extendido como demuestra que recientemente identificaran una página de Instagram conocida como “machistas de Teruel” en la que se proferían insultos al género femenino.
El inspector, que recientemente impartió también una charla en el mismo colegio dirigida a los chicos y chicas de 5º y 6º de Primaria, ofreció consejos a los padres para que sepan identificar cuando las redes sociales están dañando a los jóvenes. Por ejemplo, cambios de conductas y hábitos, falta de sueño porque dedican mucho tiempo a las redes (mas de hora y media diaria se considera muy perjudicial), desconfianza hacia los padres o problemas en el rendimiento escolar.
Otros consejos básicos para los padres es establecer el sistema de control parental en los dispositivos móviles, ordenadores y tablets, y contar con un potente antivirus, que evite el riesgo de que los ciberdepredadores puedan entrar en estos dispositivos con troyanos para conseguir imágenes comprometedoras o datos de los menores.
Evitar difundir imágenes y datos personales en las redes sociales es otra máxima, especialmente en redes como Facebook o Instagram, donde hay que evitar que los menores que se crean un perfil real (legalmente a partir de 14 años con consentimiento de los padres y a los 16 libremente) interactúen con desconocidos.